
Hoy 12 de julio celebramos el Día de la Justicia Gratuita y el Turno de Oficio. Un día para reconocer y valorar el trabajo de las abogadas y abogados que dedican parte de su tiempo a garantizar y brindar el acceso a la justicia y la defensa a todas las personas en necesidad de ello, especialmente a aquellas más vulnerables y/o sin recursos.
Es fundamental que esta labor sea mejor reconocida, equiparando las condiciones laborales y retributivas al gran esfuerzo, compromiso y desafíos a los que abogados y abogadas hacen frente.
Por acuerdo del Consejo General de la Abogacía española y todos los Colegios de Abogados de España el 12 de julio tiene lugar la celebración del Día de la Justicia Gratuita y del Turno de Oficio, para defender y divulgar la labor realizada por más de 42.000 abogados de oficio, 24 horas al día, 365 días al año, a través de los Servicios de Asistencia Jurídica Gratuita y Turno de Oficio
El acceso a la Justicia es un derecho básico reconocido tanto en la Declaración Universal de Derechos, como en el Convenio Europeo de Derechos Humanos. Es un derecho constitucional que comprende la asistencia jurídica gratuita de quienes carecen de recursos suficientes para litigar y afecta a otros fundamentales como los de igualdad, asistencia letrada al detenido, defensa y tutela judicial efectiva. Es un servicio público financiado con fondos igualmente públicos, cuya gestión está encomendada legalmente a la Abogacía de forma exclusiva, respecto de la defensa jurídica y a la Procuraduría, para la representación del ciudadano.
Lucha por la mejora del Turno de Oficio
Los 42.000 letrados del turno luchan por una remuneración digna e igual en todo el territorio español. Según los últimos datos de 2021 ofrecidos por el Consejo General de la Abogacía Española (CGAE), los abogados de oficio reciben 134 euros por cada asunto de justicia gratuita que realizan. A pesar de ello, más de 42.000 letrados en toda España continúan asistiendo voluntariamente a los ciudadanos que, por falta de recursos económicos suficientes, no pueden costearse un abogado. Por ello, hoy más que nunca celebran y reivindican los derechos que merecen por la labor gratuita que llevan a cabo con los ciudadanos.
En Dykinson hemos contactado con diferentes abogadas y abogados ejercientes o exejercientes del turno de Oficio: Ana Almiñana, abogada y mediadora, especializada en Derecho Civil y Penal en Gandía. También es formadora – Legal Coach. CEO de Iuris Gandía Abogados y de Abogacía con Alma, donde ayuda a abogadas emprendedoras a potenciar su marca personal con el método ALMA; Rachid Mohammed, Doctor en Derecho y abogado en ejercicio desde 2003, perteneciente a los Ilustres Colegios de Almería y Melilla. Actualmente es director del área de cumplimiento normativo y derecho penal económico en la firma Lazaar abogados; Mónica Gil, abogada penalista en el Centro de Estudios e Investigaciones Jurídicas (CEIJ); Bárbara Gómez Antich, Abogada penalista orgullosa, de las de trinchera. También docente del Curso de Abogacía Penal, es asociada de Rocha Paus Grupo Legal y ejerce en el Turno de Oficio de Barcelona; y, por último, Elena García, abogada penalista.
Defensa colectiva
Ana Almiñana es la primera abogada que con optimismo habla del turno de oficio: «El Turno de Oficio es de suma importancia tanto para los ciudadanos como para los abogados que empiezan. Una porque se ejerce una labor social y se protegen los derechos fe aquellas personas que no pueden pagar por los servicios de un abogado privado o de libre designación». Añade, además, cierto aprendizaje indispensable a partir de ejercer esta labor: «Enseña agilidad procesal en las guardias en centros de detención y en incidencias. Así como que pueden conocer y estudiar asuntos que puede que en su despacho no entren con tanta facilidad».
Sin embargo, estar expuesto a este servicio, a pesar de vocacional, es un acto temerario, en palabras de Mónica Gil, que añade «hace replantearse la vocación». Mientras, Elena García rememora: «El turno penal te acerca a un submundo que de otra forma no conoceríamos, me he encontrado personas alcohólicas, drogodependientes, con enfermedades mentales… personas distanciadas de la sociedad que cometen un hecho delictivo y se merecen un abogado que se comprometa con ellos, que trabaje para que tengan un procedimiento justo, una defensa al fin y al cabo».
Renovación
Rachid Mohammed nos comentó que «El modelo español del conocido como “turno de oficio” necesita una absoluta renovación, diría que transformación. Se justifica con el cumplimiento de unos mínimos estándares, pero exige un debate sincero y sin complejos sobre su eficacia». Una sentencia que apoya Bárbara Gómez, añadiendo que al turno de oficio «no se entra a ganar dinero porque se gana muy poco. Es por amor a la profesión. Aunque esto no significa que no debiera remunerarse debidamente, damos un servicio público. ¿Alguien imagina profesores o médicos de la pública cobrando 30€/mes? Entonces, ¿por qué nosotros sí lo hacemos?».